En macroeconomía existen una serie de objetivos que van enfocados principalmente hacia el crecimiento económico, la estabilidad de los precios, y la plena ocupación en el mercado de trabajo. Pero para llegar a estos objetivos se deben de establecer una serie de políticas con unos propósitos más específicos, dentro de estas políticas se encuentra la política monetaria cuyo fin a nivel general es el de controlar el dinero que circula por una economía y el tipo de interés que se debe de pagar por el mismo.
¿Qué entendemos por política monetaria?
Este tipo de política lo podemos definir como aquel proceso por el que una autoridad monetaria dentro de un país o de una comunidad de países (como el caso de la Unión Europea) se encarga de controlar la oferta y disponibilidad de la masa monetaria dentro de dicha economía.
La política monetaria tiene varios objetivos principales:
- Ser capaz de estabilizar el valor del dinero.
- Favorecer la tasa de crecimiento económico.
- Reducción del nivel de desempleo.
- Mantener el equilibrio en la balanza de pagos (diferencia entre las exportaciones e importaciones del país).
- Mantener un tipo de cambio que sea estable.
- Otorga cierta protección hacia las reservas internacionales.
Por tanto podemos entender que para controlar esta política monetaria se tienen en cuenta principalmente las variables del tipo de interés, es decir, el precio al que se presta el dinero y la oferta monetaria que existe en un momento determinado. Las herramientas que se tienen en cuenta para poder controlar estos factores son entre otras; la inflación, el tipo de cambio o el nivel de desempleo.
Tipos de política monetaria
- Política Monetaria Expansiva: El principal objetivo de este tipo de economía es el de incrementar la oferta monetaria existente, es decir la cantidad de dinero que hay en circulación. Las tres medidas llevadas a cabo para lograrlo es a través de una reducción de los tipos de interés, disminución del coeficiente de caja e incremento del dinero prestado a las entidades bancarias.
- Política Monetaria Restrictiva: El objetivo en este caso es el de reducir la cantidad de dinero que hay en circulación. ¿Cómo lo consigue en este caso? Pues realizando las acciones contrarias a la política expansiva, es decir disminuyendo el flujo de dinero ofrecido a los bancos, incrementando la tasa de interés y reduciendo el coeficiente de caja. Con esto lo que conseguirá es descender la demanda agregada y finalmente una reducción de los precios.