Cuando hablamos de rentabilidad anualizada nos referimos a un porcentaje del beneficio o pérdida que se obtendría considerando que el plazo de inversión de los activos es de exactamente un año. La anualización de la rentabilidad es utilizada muy habitualmente entre los inversores porque permite comparar diferentes productos financieros con horizontes temporales y plazos de vencimiento distintos y así poder obtener una visión de qué tipo de productos son los más rentables.
¿Es lo mismo una rentabilidad anualizada que una rentabilidad media?
A nivel general si podemos decir que una rentabilidad media suele ofrecer un resultado muy similar a una rentabilidad anualizada. Pero realmente no se calculan de la misma manera y por tanto su resultado no siempre es exactamente igual.
La rentabilidad media ofrece una visión más generalizada de la rentabilidad de una cartera, se trata de una visión de la tendencia central de la cartera. Con la rentabilidad anualizada, que puede ser calculada no solo en referencia a 1 año de tiempo sino a más, se obtiene un porcentaje de rentabilidad más fiable.
Ejemplo para explicar la rentabilidad anualizada
Supongamos que hemos invertido 5.000€ en un determinado fondo, a lo largo del tiempo el fondo perdió un 20% durante el primer año, durante el segundo año recuperó un 15% y en el tercer año volvió a tener una tendencia alcista y recuperó un 30%.
Rentabilidad Media: En este caso la rentabilidad media se calcularía sumando todas las variaciones producidas a lo largo de los 3 años y dividiéndolas entre el número de años que queremos analizar, en este caso 3 años.
Rentabilidad anualizada: La rentabilidad anualizada de estos 3 años de inversión se calcularía no a través de una media aritmética como en el caso anterior, sino a través de una media geométrica. Para calcular la rentabilidad anualizada de una inversión a través de una media geométrica lo que se hace es en primer lugar añadirle un 1 al porcentaje de la rentabilidad de cada uno de los años, para que así todos los números sean positivos. Luego multiplicamos dichos porcentajes entre ellos y aplicamos la función exponencial de un individuo por el número de años de la operación que queremos analizar, restándole finalmente un 1 para obtener la rentabilidad anualizada.