Cuando realizamos operaciones de capitalización para calcular el valor futuro de una determinada cantidad inicial lo que hacemos es capitalizar, que consiste en sumarle los intereses al capital inicial, para ello se recurre al factor (1+i) T que se multiplica al capital inicial para obtener el final.
Por el contrario, cuando lo que queremos es actualizar el valor de un capital final a su momento inicial lo que se hace es restarle los intereses y para ello lo que hacemos es dividirle al capital final el factor (1+i) T.
Por tanto, mientras que cuando realizamos una capitalización lo que hacemos es sumarle los intereses al capital inicial (Ci) para obtener el capital futuro (Cn) y por tanto se trata de aplicarle un determinado tipo de interés, por el contrario, cuando lo que hacemos es actualizar el capital final para obtener el inicial lo que le aplicamos es una tasa de descuento, también llamado tipo de descuento.
Por tanto ¿qué entendemos por tipo de descuento?
Se trata de la tasa, normalmente acuñada con la letra k, utilizada para la actualización de un determinado capital o de los flujos de un determinado capital en la valoración de proyectos de inversión dinámicos. Su cálculo se puede hacer de distintas formas según los datos de la inversión con los que se trabaje.
Alternativas para determinar el tipo de descuento:
- La rentabilidad de otra inversión: A la hora de analizar una determinada inversión suele exigirse como mínimo la obtención de una rentabilidad similar a otra inversión alternativa de iguales características. Por ejemplo, si una empresa ha realizado proyectos de inversión con una rentabilidad del 10%, como mínimo el resto de proyectos similares que realiza tendrán esta rentabilidad. En este caso el tipo de descuento pasa a denominarse coste de oportunidad.
- El coste de los recursos utilizados: En este caso, para el cálculo del tipo de descuento lo que se hace es tener en cuenta el coste de los recursos empleados por la empresa para realizar la inversión.
El tipo de descuento es un elemento básico para el análisis de las inversiones que puede realizar una empresa que lo que permite es comparar entre distintos capitales en diferentes momentos en el tiempo. Es decir, el tipo de descuento es el coste que corresponde las los recursos financiero utilizados para ejecutar una inversión. Estos recursos pueden ser propios, aportados por el inversor, o ajenos, aportados por acreedores. Una vez que sabemos el coste de la inversión podemos determinar cuál será la rentabilidad mínima que deberíamos exigirle a la inversión analizada.